LA LUZ DEL MUNDO

“LA LUZ DEL MUNDO”
Abraham W. Barrera Bakit
PASTOR
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Juan 8:12.- “Luego Jesús les habló otra vez y dijo: -Yo soy la luz del mundo. El que me sigue nunca andará en la oscuridad, sino que tendrá la luz que da vida.” (PDT)

“Una vez más Jesús se dirigió a la gente, y les dijo: --Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.” (NVI)

“Jesús volvió a hablarle a la gente:
--Yo soy la luz que alumbra a todos los que viven en este mundo. Síganme y no caminarán en la oscuridad, pues tendrán la luz que les da vida.” (TLA)

“Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida”. (RV60)

En el evangelio de Juan existen dos palabras claves: LUZ Y VIDA. Un rápido resumen nos permite encontrar a Jesús en la fiesta de los Tabernáculos. Vemos discusiones entre el pueblo acerca de ÉL, y de los judíos con ÉL. Ante la obstinación de la incredulidad, JESÚS hace esta declaración: “Yo soy la luz del mundo” “Yo soy la luz que alumbra a todos los que viven en este mundo”

El texto nos hace pensar en que:

- El mundo es un lugar de tinieblas
- En el advenimiento de la luz
- En los bienes que imparte

01.- EL MUNDO ES UN LUGAR DE TINIEBLAS

Lo era físicamente antes del primer día de la creación. Han pasado los milenios y moralmente lo es el día de hoy.

Mucha ciencia humana, cada día más. Pero a su vez, entre más ciencia humana, mayor oscuridad espiritual. Y esto queda al desnudo cuando vemos:

- La falta de conocimiento de Dios cada día mayor por parte de las personas.
- Día a día crece la corrupción de las costumbres.
- Se multiplican los errores, ciertamente “andan en tinieblas.


02.- EN EL ADVENIMIENTO DE LA LUZ

Dios en su infinito amor, no ha querido dejar a los hombres en tinieblas. Aún antes de la venida de Cristo los profetas reflejaron algo de la luz que había de venir.

- Cristo es el GRAN LUMINAR, EL SOL. Y Cristo lo es por su carácter y por su doctrina. Cristo es la piedra de toque de toda acción, de toda vida y de toda doctrina. Una leyenda antigua cuenta de uno que encendió una antorcha, y salió en busca del sol. El sol se descubre a sí mismo. Lo hayamos por su propia luz. Del mismo modo, no necesitamos evidencias extrañas para demostrar la autoridad divina de Nuestro Señor Jesucristo. No necesitamos inventar instrumento alguno para averiguar que el sol brilla en el mediodía; y millares hay que no necesitan tratados eruditos para probarles la autoridad de Jesús. Las palabras de Jesús penetrando en el corazón, en la razón y en la conciencia, dan testimonio de ÉL.
- Luz insuperable. Velas, petróleo, gas, electricidad, dan ayuda relativa. Pero el sol es insubstituible. Así también lo es CRISTO.
- Es penetrante. La luz se introduce por la más pequeña rendija, deja todo al descubierto, tal vez, como los rayos X. Así también Cristo, desnuda todas las cosas con su Luz admirable.
- Es universal. “Alumbra a todo hombre”. La luz científica no entra en las mentes incultas. La de Cristo es percibida en todo su fulgor, aún por los niños, o las personas sin educación.
- Es permanente. Jamás se apaga. La luz de Cristo es eterna.

03.- LOS BIENES QUE IMPARTE

- ¿A quiénes? “El que me sigue”. Debieran serlo todos. ¿Por qué no
lo hacen? Juan 3:19-20.- “Y así es como Dios juzga: yo he
venido al mundo, y soy la luz que brilla en la oscuridad, pero como la gente hacía lo malo prefirió más la oscuridad que la luz.”
“Todos los que hacen lo malo odian la luz, y no se acercan a ella para que no se descubra lo que están haciendo.” La verdad que las personas cierran las ventanas y los ojos, pues no quieren ver la LUZ.
- Males que evita. “No andará en tinieblas”. Con Cristo, estamos libres de temor, de peligros, yerros, tropiezos y pecados.
- Bienes de que goza: LUZ –conocimiento, dirección, alegría, santidad. Puede haber sombras pasajeras –dudas, penas, tentaciones. Pero la luz vuelve a brillar, y nunca son completas las tinieblas. Para el cristiano la “la luz…. Va en aumento hasta que el día es perfecto.” Proverbios 4:18-19.- “El camino de los justos es como la luz del amanecer, que cada vez brilla más hasta que se hace de día.”
“En cambio, el camino de los perversos es como las tinieblas;
No saben con qué tropiezan.

Juan 12:48.- “El que me rechaza y no obedece lo que enseño,
será condenado cuando llegue el fin, por no obedecer mi
enseñanza”.



¡Ven, aférrate a la LUZ! CRISTO te alumbrará en tu camino, en tus problemas, en tus penas, en tus pecados, en tu hora postrera, y ¡POR LA ETERNIDAD!