domingo, 26 de diciembre de 2010

EDIFIQUEMOS JUNTOS

EDIFIQUEMOS JUNTOS
Abraham W. Barrera Bakit
PASTOR
e-church
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1ª Pedro 2:5.- “Vosotros también, como piedras vivas, sed edificados
como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer
sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de
Jesucristo”

Después que el cristiano en un acto de fe a puesto su fundamento en el Señor, puede comenzar a edificar. Así en la vida del cristiano se harán visibles las partes de su edificio espiritual. Pues no sólo estamos edificando como individuos, sino también estamos edificando en nuestras relaciones sociales y en todas las áreas de nuestra vida. No podemos olvidar que formamos parte de la iglesia universal de nuestro Señor Jesucristo, por lo tanto, todos los creyentes juntos estamos siendo edificados como una estructura completa basada en Jesucristo. La Biblia dice en 1ª Pedro 2:5.- “Vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo”.

Y en Efesios 2:20-22 leemos estas palabras:
Efesios 2:20 “edificados sobre el fundamento de los apóstoles y los profetas, siendo Cristo Jesús mismo la piedra angular”.
Efesios 2:21 “En él todo el edificio, bien armado, se va levantando para llegar a ser un templo santo en el Señor”.
Efesios 2:22 “En él también ustedes son edificados juntamente para ser morada de Dios por su Espíritu”.

Todos somos piedras del mismo edificio. Las Escrituras Sagradas nos dan mucha instrucción respecto a nuestras relaciones mutuas. He aquí algunas palabras de consejo que el apóstol dirigió a algunas iglesias:

Efesios 4:2-3.- “Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor”,
“solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vinculo de la paz”.

Efesios 4:29.- “Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes”.

Efesios 4:23.- “Antes ser benignos unos con otros, misericordioso, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo”.

Gálatas 6:2.- “Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo”.

Gálatas 6:10.- “Así que según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe”.

Colosenses 3:14.- “Y sobre todas estas cosas de amor, que es el vínculo perfecto”.

En estos versículos se enseña claramente que la comunidad de creyentes tiene una gran responsabilidad de cada uno hacia los otros. Entre los creyentes, más que en cualquier otro grupo de personas, se ha de manifestar el espíritu de comunidad: compañerismo, comunión, asociación, amor, interés, dar y recibir. La iglesia primitiva practicó esta clase de ESPÍRITU DE COMUNIDAD (HECHOS 2:43-47).

Cuando edificamos en comunidad con otros, debemos ser adaptables. ¡NO DIJE CAMBIABLES! Una persona adaptable es aquella que se ajusta a las formas más adecuadas de suplir las necesidades de otros con una meta común. Si queremos ganar a nuestra comunidad para Cristo, hemos de trazar un plan. Más siempre hemos de estar dispuestos a que el ESPÍRITU SANTO nos dirija. Si ÉL desea cambiar el plan, permítaselo.

Sólo de esa manera, usted tendrá una vida plena y resplandecerá en su rostro la presencia de Dios. Así podrá ser un instrumento que influya en la construcción de un mundo mejor, pues con su testimonio predicará más que con sus palabras y la misión encomendada de RESCATAR PERSONAS PARA EL REINO DE DIOS será algo tan real, y tan hermoso, que logrará las metas trazadas en el plan de construcción de su comunidad.


Y ES POR ESO QUE EL LLAMADO ES: EDIFIQUEMOS SOBRE UN FUNDAMENTO APROPIADO

MATEO 7:24-27.- "Por lo tanto, quien oiga mis enseñanzas y las ponga en práctica, será como el hombre prudente que construyó su casa sobre roca”.
“Llovió fuerte, los ríos crecieron, los vientos soplaron y golpearon contra aquella casa. Sin embargo, la casa no se cayó porque estaba construida sobre roca.”
"Pero el que oiga mis palabras y no las ponga en práctica, será como el necio que construyó su casa sobre la arena.”
“Llovió fuerte, los ríos crecieron, los vientos soplaron y golpearon contra la casa. La casa se derrumbó y fue todo un desastre".


Dos hombres están excavando un pozo. Un tercer hombre pasa por ahí y pregunta:

¿Qué está haciendo con la pala, señor?
Solo estoy excavando este pozo

¿Y usted señor?
Bueno, yo estoy edificando una hermosa escuela.

¿Nota la diferencia entre la perspectiva o actitud de cada hombre? Uno lo
consideraba sólo como un arduo trabajo. No podía ver más allá del trabajo que debía realizar en ese momento. El otro si pudo ver hacia el futuro, la hermosa escuela que sería edificada en ese lugar.


¿Es usted como el primer hombre o el segundo? ¿vislumbra usted un hermoso edificio , o sólo fango que se ha de excavar? Debemos considerar sobre el fundamento sobre el cual debemos edificar y cómo edificar sobre ese fundamento. ¡Seamos edificadores en nuestra comunidad!

La vida cristiana es semejante a un edificio. Bajo cada gran edificio debe haber un buen cimiento. Los cimientos o fundamentos generalmente se hacen de piedra y cemento. Sostienen a todo el edificio. Sin ese fundamento el edificio se derrumba. Lo mismo ocurre con la vida cristiana. Su espíritu de comunidad debe basarse sobre la roca sólida, JESUCRISTO. Él es el fundamento.

La Biblia dice en 1ª Corintios 3:11.- “La base de todo ya está construida y nadie puede construir otra porque esa base es Jesucristo.”

Jesús contó la historia de dos edificadores en Mateo 7:24-27. Uno edificó su casa sobre la roca, sobra decir que tenía un muy buen fundamento. El otro edificó su casa sobre la arena, sin un fundamento apropiado. Las tormentas de desataron y comenzaron las inundaciones. La casa edificada sobre la arena se desplomó, pero la casa edificada sobre la roca, permaneció firme.

En esta historia, Jesús dijo que el hombre sabio que edificó sobre una roca es como un hombre que obedece las palabras de Cristo. La roca sobre la cual edifica son las enseñanzas de Cristo. El hombre que edificó sobre la arena es como el que no obedece las palabras de Cristo. Desde hace muchos años, los ladrillos y las piedras se han usado como materiales de construcción.

Los mismos ladrillos o piedras que se pueden usar para construir iglesias, escuelas y hospitales, pueden usarse también para construir cárceles. Las mismas piedras que se usan para edificar puentes pueden usarse también para edificar paredes. La única diferencia reside en el diseño de los planos del constructor.

Los puentes les permiten a las personas a circular en dos direcciones al pasar por sobre los obstáculos. Los puentes constituyen medios para establecer comunidad. Unen a las personas, es decir, producen comunión, producen una relación en doble sentido, o sea ida y regreso, una relación de dar y recibir.

Ahora bien, algunos puentes o paredes pueden edificarse sin ladrillos o piedras. Edificamos puentes al demostrar amistad, ayudar a la gente, al estar a su disposición cuando nos necesitan. O edificamos paredes cuando negamos nuestra amistad y nos aislamos de los demás.

Es muy diferente decir que creemos en Cristo, y otra de que vivimos en
obediencia a sus Palabras. Jesús dijo en Mateo 7:21.- " Algunos que me dicen: '¡Señor, Señor!', no tendrán parte en el reino de Dios. Sólo entrará el que obedezca a mi Padre que está en el cielo.”

Usted necesita un fundamento sólido en su vida sobre el cual basarse en las tormentas de la vida. Estas se presentan de las mas variadas manera: la muerte de un ser querido, enfermedad, pérdida de posesiones o tentaciones. Si hemos edificado sobre el fundamento de la obediencia a Dios, tenemos una conciencia limpia y la confianza de que El nos ayudará en medio de las tormentas. Leemos en 1ª Juan 3:21-22.- “Queridos amigos, si no nos sentimos culpables de estar haciendo lo malo, entonces podremos acercarnos a Dios sin miedo.” “Recibiremos de él cualquier cosa que le pidamos porque obedecemos sus mandamientos y estamos haciendo lo que a él le agrada.” Sólo nuestra fe y nuestro fundamento en el Señor y en su Palabra nos guardará durante tiempos difíciles. ¿ES ÉL SU FUNDAMENTO? ¿ES USTED OBEDIENTE A SU PALABRA?

Si su respuesta es SÍ, está usted poniendo un fundamento sólido a su vida Y A SU FAMILIA. Si no, pídale a Dios que le ayude a obedecerle, para que pueda ser un vencedor en esta vida y así dedicarse por completo a la tarea encomendada por NUESTRO SEÑOR Y SALVADOR JESUCRISTO, que no es otra que RESCATAR PERSONAS PARA EL REINO DE DIOS.

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