jueves, 25 de noviembre de 2010

PROVOCADORES DE MILAGROS

PROVOCADORES DE MILAGROS
Abraham W. Barrera Bakit
PASTOR
http://worldchurch.wordpress.com
http://facebook.com/worldchurch


Marcos 5:21-43.-
21 “Jesús llegó en la barca al otro lado del lago y se quedó en la orilla, porque mucha gente se juntó a su alrededor.”
22 “En ese momento llegó un hombre llamado Jairo, que era uno de los jefes de la sinagoga. Cuando Jairo vio a Jesús, se inclinó hasta el suelo”
23 “y le rogó:
--Mi hijita está a punto de morir. ¡Por favor, venga usted a mi casa a poner sus manos sobre ella, para que sane y pueda vivir!”
24 “Jesús se fue con Jairo. Mucha gente se juntó alrededor de Jesús y lo acompañaron.”
25 “Entre la gente iba una mujer que había estado enferma durante doce años, pues perdía mucha sangre”.
26 “Había gastado en médicos todo el dinero que tenía, pero ellos no habían podido sanarla; más bien, la maltrataron más. Cada día se ponía más enferma.”
27 “La mujer había oído hablar de Jesús, y pensaba: "Si tan sólo pudiera tocar su ropa, sanaría". Por eso, cuando vio a Jesús, se abrió paso entre la gente, se le acercó por detrás y le tocó la ropa.”
29 “Inmediatamente dejó de sangrar y supo que ya estaba sana.”
30 “Jesús se dio cuenta de que había salido poder de él. Entonces miró a la gente y preguntó:
--¿Quién me tocó la ropa?”
31 “Sus discípulos le respondieron:
--¡Mira cómo se amontona la gente sobre ti! ¿Y todavía preguntas quién te tocó la ropa?”
32 “Pero Jesús miraba y miraba a la gente para descubrir quién lo había tocado.”
33 “La mujer, sabiendo lo que le había pasado, fue y se arrodilló delante de él, y temblando de miedo le contó toda la verdad.”
34 “Jesús le dijo:
--Hija, has sido sanada porque confiaste en Dios. Vete tranquila.”
35 “Jesús no había terminado de hablar cuando llegaron unas personas de la casa de Jairo y le dijeron:
--¡Su hija ha muerto! ¿Para qué molestar más al Maestro?”
36 “Jesús no hizo caso de lo que ellos dijeron, sino que le dijo a Jairo:
--No tengas miedo; solamente confía.”
37 “Y sólo permitió que lo acompañaran Pedro y los dos hermanos Santiago y Juan.”
38 “Cuando llegaron a la casa de Jairo, vieron el alboroto y que la gente lloraba y gritaba”
39 “Entonces Jesús entró a la casa y les dijo:
--¿Por qué lloran y hacen tanto escándalo? La niña no está muerta; sólo está dormida.”
40 “La gente se burló de Jesús. Entonces él hizo que todos salieran de allí. Luego, junto con los padres de la niña y los tres discípulos, entró al cuarto donde ella estaba.”
41 “La tomó por la mano y le dijo en idioma arameo:
--¡Talitá, cum!
Eso quiere decir: "Niña, levántate".”
42 “En ese mismo instante la niña, que tenía doce años, se levantó y comenzó a caminar. Cuando la gente la vio, se quedó muy asombrada.”
43 “Jesús ordenó que no le contaran a nadie lo que había pasado. Después mandó que le dieran de comer a la niña.”

El colaborador de Louis Pasteur en la demostración que había sido llamada la “teoría de los gérmenes” fue el doctor Félix Ruh, un doctor judío de París. La nieta del médico había muerto de la difteria negra, y el doctor Ruh, haciendo voto de que él encontraría lo que había matado a su nieta, se encerró por días en su laboratorio. Salió de su laboratorio con una determinación feroz de comprobar, junto con su colega Louis Pasteur, que la “teoría de lo gérmenes” no fuere sólo la teoría sino una verdad científica.

La asociación médica ya había desaprobado a Pasteur y logró su destierro, pero él no se fue lejos de París. Se escondió en un bosque y allá edificó un laboratorio en el cual continuaba sus investigaciones prohibidas.

Veinte hermosos caballos fueron llevados por entre el bosque al laboratorio improvisado. Científicos, doctores y enfermeras vinieron a observar el experimento. Ruh abrió la bóveda de acero y sacó un balde grande lleno de gérmenes de difteria negra, los cuales había pasado meses cultivando cuidadosamente. Había suficientes gérmenes en ese balde para matar a todas las personas de Francia. Con esos gérmenes mortíferos, el científico untó la nariz, la lengua, la garganta y los ojos de cada uno de los hermosos caballos.

Los científicos esperaron varios días para ver lo que pasaría. Cada uno de los caballos desarrolló una fiebre muy fuerte, muy pronto murieron todos, menos uno. La mayoría de los doctores y científicos se cansaron del experimento y no esperaron para ver lo que ellos creían sería la segura muerte del último caballo.

Por varios días este último caballo permaneció prácticamente acostado en el suelo. Mientras Ruh, Pasteur y varios otros dormían en catres, el asistente de guardia en el establo había sido instruido que debía despertar a los científicos al notar cualquier cambio en la temperatura del animal.

Como a las dos de la madrugada la fiebre mostró una baja de medio grado, y el asistente despertó a los científicos. Al llegar la mañana, el termómetro había bajado dos grados más. Y para la noche la fiebre se había retirado completamente y el caballo pudo ponerse en pie, comer y beber.

Entonces el doctor Ruh tomó un mazo y le pegó al hermoso caballo un golpe mortal en medio de los ojos. El científico sacó toda la sangre de las venas de este animal que había desarrollado la enfermedad pero la había vencido. Los científicos se movilizaron rápidamente al Hospital Municipal de París. Arremetieron contra el superintendente de los guardias y entraron por la fuerza en unas salas del hospital donde se había segregado a trescientos bebés para que murieran de difteria negra. Por la fuerza, vacunaron a cada uno de los bebés con la sangre del caballo. Todos, menos tres, vivieron y se recuperaron completamente.

Fueron salvos por la sangre un vencedor, gracias al trabajo de unos provocadores.

- Hay quienes piensan que los milagros caen así como así, sin que antes ocurra nada previo, solo la misericordia de Dios. Y desde luego que algunas veces es así, pero hay un tipo de gente que sabe provocar milagros, que desafían los impedimentos y hacen que la misericordia de Dios actúe cuando no estaba previsto actuar.

- Hay quienes tienen fe para salvación y poco más, ahí se quedan, hay quienes tienen fe para salvación y finanzas, y ahí se quedaron, pero hay quienes tienen fe para provocar milagros cuando ni Dios tenía pensado hacerlos, como fue el caso de esta mujer.

- Dios está buscando provocadores de milagros para que hagan cosas maravillosas.

- En este pasaje vemos a dos provocadores de milagros a Jairo y a la mujer con flujo de sangre. ¿Porque aparecen juntos en el mismo pasaje? Porque los dos son provocadores de milagros, y Dios quiere que aprendas de estos dos personajes que podemos provocar los milagros de Dios.

- Jesús iba "pasando" (v.21) y Jairo le hizo quedarse para sanar a su hija, y la fe de la mujer le hizo detenerse.

- Vemos varias características de los provocadores de milagros:

01.- Los provocadores de milagros son gente que se humilla ante Cristo.-

En el versículo 22 el principal de la sinagoga, uno de los jefes, se postra ante alguien que no es nada en la sinagoga (Jesús). Jairo no tuvo en cuenta la posición social de Jesús, ni la suya sino que se postró ante Jesús.



2.-Los provocadores de milagros son gente que no se desaniman cuando sus oraciones no son contestadas.- "Y le rogaba mucho" (V.23)

A veces no basta con una oración, hay que estar clamando a Dios. No desistas, no te desanimes, continúa orando y el día menos pensado vendrá el milagro. Muchos se desaniman al poco tiempo de no recibir la contestación.

3.-Los provocadores de milagros son gente que cree que el toque de Jesús sana.- "pon las manos sobre ella para que viva" (V.23)

Ya sus manos amorosas de padre la había tocado, las manos de la madre también, las manos de los médicos posiblemente también habían estado tocándola, y ninguna mano había sanado a la niña. Precisaba unas manos especiales, las manos de Jesús.

- Mírate las manos, esas son las manos de Jesús en la actualidad.

4.- Hay gente que se convierte en provocador de milagros cuanto todo lo demás le falla.- "Y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes iba peor" (V.26)

Hay gente que se convierte en provocador de milagros cuando todo lo demás le falla, cuando nada le suple lo que necesita, entonces clama a Jesús con toda su fe y El Señor actúa.

5.- Los provocadores de milagros son gente que no se desanima ante los obstáculos y pelea hasta conseguir su milagro.- "vino por detrás de la multitud, y tocó su manto" (V.27)

Tuvo que abrirse paso entre la multitud para tocar a Jesús. No era fácil, la gente apretaba, pero nada de eso le impidió tocar el borde del manto.

6.- Un provocador de milagros no busca atajos, sino que sabe que Jesús es el único que sana y salva.-

Jairo viene a gritos delante de todo el mundo, la mujer viene por detrás y en silencio, pero los dos llegan a Cristo.

7.- Los provocadores de milagros son gente agresiva que asombra a Dios.- "Si yo tocare" (V.28)

La fe de esa mujer era agresiva, Jairo necesitaba que Jesús se desplazara para tocar, pero esta mujer cree que ella puede tocar el borde del manto. Los dos reciben la respuesta a su fe, pero la fe de esta mujer no espera a nada, se adelanta a todo, actúa, sabe que la bendición está en Cristo y viene a tomar esa bendición. Es la fe de los que saben sacar el poder de Dios, y Dios ni se entera hasta que aquello ocurre. Es la fe de los que asombran a Dios. A este tipo de gente Dios les llama hijos (V.34)


8.- Los provocadores de milagros son gente distinta.-

Todos tocaban a Jesús en el barullo de la multitud, pero solo la mujer recibió el milagro. Era distinta, tocaba distinta.

9.- Los provocadores de milagros ven a Dios moverse.- (V.40) "...tomó al padre y a la madre de la niña... y entró donde estaba la niña"

Jesús toma a Jairo y a los apóstoles para que vean el milagro de la resurrección. Si eres un provocador de milagros serás espectador de la gloria de Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario